Los tiempos del artista.
Qué difícil es hacer arte, cuando te piden un trabajo “para ayer”
Los muchachos estaban contentos porque consiguieron una sede para poder reunirse y almacenar las cosas de la agrupación lubola, el problema que tiene es que el edificio es muy viejo y está muy deteriorado, problema que poco a poco van a ir solucionando, para comenzar, me pidieron si no me animaba a dibujarles el nombre de la agrupación y algún que otro tambor, que ellos luego lo pintaban, un chico un repique y un piano, ellos lo querían ya! y yo “ya” no podía porque tenía otros trabajos prometidos para determinada fecha pero ellos insistieron y decidí arriesgarme a hacer algo que no se puede, juntar rapidez con calidad, para obtener calidad se necesita dedicación y elaboración y las opciones que ellos me estaban dando era que lo hiciera “lo antes posible”.
Les di el OK y al otro día 8.00am estaba en la sede con todo pronto para comenzar, la idea era solo dibujar las letras y los tambores que ellos luego las pintaban, eso me ahorraba bastante tiempo y a las 10.00am por lo menos quería seguir con el trabajo que había prometido. Dibuje las letras y al mirarlas de legos aquello había quedado horrible y una vez más comprobé que no se puede juntar rapidez con calidad, así que fui y hable con el cliente al cual le había prometido el trabajo y le expliqué que tenía que hacer uno de apuro, que precisaba todo el día y que recién al día siguiente iba a poder seguir, me dijo que no había problema.
Así que tenía solo un día, fui a casa y me puse a diseñar el nombre “Eclipse de Luna”, no solo busque una imagen de un repique un piano y un chico, sino que encontré unas imágenes de gente tocándolos. Les mostré mi idea a los muchachos y me miraron como si fuese loco cuando les intenté explicar que le iba a hacer letras góticas pero no las iba a pintar, las iba a dejar en blanco pero a los bordes les iba a hacer un difuminado azul (después de todo lo terminé pintando yo), ninguno tuvo fe de que podía lograr alguna de aquellas imágenes.